Mi piel, luminosa

Sinopsis

En marzo de 2018 la productora de Nicolás Pereda fue seleccionada por la Secretaría de Educación Pública de México para hacer un registro de cómo se habían utilizado los recursos del programa de mejora de las escuelas primarias en distintos centros de la república mexicana. La primera escuela que visitaron fue el Colegio Tomás Moro, en el estado de Michoacán. Allí encontraron una historia que parecía salida de un sueño.

Pereda codirige este encargo junto a Gabino Rodríguez, autor fetiche de su filmografía. Como en el resto de su obra, la línea que separa las historias reales de las ficticias se difumina. El relato cambia de registro cuando el escritor Mario Bellatin aparece en escena y nos sumerge en una especie de relato onírico.